Worms es uno de los juegos más importantes de la historia, y no sólo es enorme la cantidad de variantes del título original que hemos encontrado, sino que existen además muchos otros que evidentemente están inspirados en él. Es el caso de Hedgewars, un título que vamos a analizar a continuación pero que tiene muchísimos puntos en común con el Worms de toda la vida, con un método de competencia realmente semejante.

Ahora bien, Hedgewars se diferencia de Worms a partir de que en este caso los protagonistas principales no son gusanos, como en el título primero, sino que se utilizan erizos, dándole un toque propio como para evitar tantas confusiones. Por lo demás, los objetivos son más bien semejantes, ya que tenemos que intentar terminar las partidas al triunfar venciendo a cada uno de los integrantes de las tropas adversarias.

Por supuesto, eso puede sonar sencillo pero la verdad es que no lo es, ya que si quieres tener éxito deberás afinar la puntería todo lo posible, y lo importante será que aprendas a conocer las parábolas que los proyectiles realizan. La física se transforma entonces en uno de los elementos indudablemente distintivos de Hedgewars, teniendo en cuenta que es única, y que hasta que no la comprendamos, será difícil que venzamos a los rivales.

Algo sin dudas atractivo de Hedgewars y que resulta fundamental pensando en este tipo de juegos, tiene que ver con la enorme variedad de escenarios que forman parte del título, un cúmulo de escenarios animados que en muchos casos se desarrollan aleatoriamente. Esto significa que es muy difícil que nos veamos ante un mismo escenario en poco tiempo, colaborando con la no repetición de la diversión, algo sin dudas positivo.

Hedgewars incluye luego tres modos de juego bien diferenciados entre sí. Por un lado tenemos el clásico de Un jugador en el que tendremos que enfrentarnos a la inteligencia artificial de la máquina, y que no requiere de ningún tipo de conexión. También disponemos de un Modo Multijugador en red, otro habitual; pero además poder disfrutar del título en Multijugador sin necesidad de estar conectados a una red, sino con quienes estén a nuestro alrededor.

Tienes que tener en cuenta que en el caso delModo Multijugador, Hedgewars te permitirá enfrentar hasta a siete personas, es decir ocho en total contigo, por lo que se trata de una propuesta más generosa que en otros juegos similares o del mismo estilo. Y un consejo importante que te damos: cuidado con el fuego amigo, porque el disparo de algún compañero también puede producirte daño, así que mejor que estés atento.

A medida que mientras lideras tu batallón de erizos consigues provocar el daño suficiente en los demás equipos, obtendrás todo tipo de ganancias, además de mejorar la capacidad de destrucción de tus armas, algo fundamental en este tipo de situaciones. En total, tenemos aproximadamente 50 armas a disposición, todas las cuales poseen diferentes características entre sí, de forma que tendrás que analizar muy bien cuál usar en cada caso.

Tampoco queríamos dejar de mencionar, ya llegando al final de este análisis, que si bien algunos de los contenidos y menúes de Hedgewars se encuentran traducidos al español, no debemos fiarnos demasiado de esa traducción pues está repleta de errores. De hecho, determinadas palabras permanecen en inglés y queda un poco la sensación de haberse utilizado un traductor virtual. No es un problema grave, pero podría solucionarse.

Los gráficos de Hedgewars junto con su interfaz de usuario, mientras tanto, podemos decir que nos han gustado mucho, teniendo en cuenta que mantienen algo fundamental que es un espíritu propio que lo distingue de cualquier otro título semejante, más allá de la evidente inspiración en Worms. Los íconos que distinguen algunas de las funciones o elementos del juego están bien logrados, y sin dudas su estética es uno de los puntos fuertes.

Lo que más nos ha gustado de Hedgewars es sin dudas que a partir de un juego conocido por todo el mundo como Worms, han sabido desarrollar otro título divertido, con elementos en común pero otros diferentes que redundan en una muy buena alternativa de entretenimiento. También el hecho de decidir nosotros mismos si queremos enfrentar a la inteligencia artificial del sistema o a otros usuarios es un punto a favor.

Los aspectos negativos de Hedgewars que hemos visto en nuestra experiencia de uso son más bien mínimos, y es por eso que vamos a detenernos en el único que consideramos que debería ser solucionado cuanto antes por sus desarrolladores: la traducción. Está tan mal terminada que por momentos queda la idea de que sería incluso más sencillo comprender todos los contenidos y funciones en inglés que en esta mezcla de idiomas que ofrecen.

En resumen, podemos concluir diciendo que Hedgewars es un juego que tienen que instalar y probar en sus ordenadores todas aquellas personas que en algún momento se han entretenido con Worms, pues el nivel de diversión es semejante. Y si bien los elementos en común son suficientes como para hallar un hilo conductor entre ambos, también aparecen otros novedosos que confluyen en una propuesta por demás atractiva.