Linux MultiMedia Studio, más conocida como LMMS, es una herramienta que nos permite desarrollar todo tipo de piezas musicales, y que ha sido creada para funcionar como complemento del también famoso FL Studio. En efecto, gracias a esta plataforma, tenemos la posibilidad de generar todo tipo de audios desde cero, contando con un sinfín de herramientas que nos permitirán aprovechar al máximo nuestra imaginación.

Como todo buen programa de creación y edición de archivos, éste destaca porque nos permite abrir varias ventanas al mismo tiempo, lo cual es perfecto para trabajar en todos los retoques que queramos realizar encima de nuestras producciones. De este modo, podrás ir añadiendo todo tipo de elementos a tus piezas musicales, reproduciéndolas sin inconvenientes, para ir corriendo sobre la marcha, hasta que estés conforme con tus resultados.

Justamente, esta posibilidad de abrir cuantas ventanas queramos al mismo tiempo, nos ha resultado atractiva porque produce una experiencia personalizable que a la mayoría de los usuarios les será de enorme utilidad. Para que te des una idea, si quieres realizar una melodía sencilla tal vez con una o dos ventanas abiertas podría serte suficiente, mientras que si quieres generar una base completa, podrás abrir varias y utilizarlas todas juntas.

¿Qué tipo de herramientas nos ofrece esta aplicación? Básicamente todas las que puedas imaginarte en lo que a generación de piezas musicales refiere. Para comenzar, disponemos de teclados con sonidos o efectos variados. Gracias a esta enorme cantidad de posibilidades de pequeños sonidos, es que podemos generar piezas musicales completas, perfectas para mostrar el genio que tenemos en nosotros.

Incluso, una característica de este programa que nos ha parecido muy interesante, es la de poder controlar muchas de sus funciones utilizando un teclado MIDI especializado para ello, de modo que si tienes uno o piensas comprarlo, podrás aprovecharlo al máximo. Si no quieres estar controlando a mano tus producciones musicales, un teclado MIDI te dará una experiencia muy superior.

Por otro lado, LMMS destaca también por la posibilidad de importar archivos en formatos como por ejemplo OGG o WAV, que son muy habituales en estos tiempos. Una vez que hayan sido cargados por el sistema, podrás realizarle todas las modificaciones que consideres necesarias. ¿Y qué formatos podemos exportar? Otros comunes, como FLV, VST o MIDI, aunque una de sus pegas es que no permite exportar creaciones en MP3, una auténtica pena.

Además de eso, LMMS dispone de un mezclador FX de 64 canales, que te permitirá tomar tu pista, ir cargando todo tipo de instrumentos que tengas a disposición, y añadir una enorme cantidad de efectos en la mesa, hasta lograr lo que buscas.

De igual modo, nos ha parecido interesante el hecho de que cuando contamos con poco tiempo, tenemos la posibilidad de comenzar un proyecto hasta donde lleguemos, y en caso de tener que marcharnos, poder guardarlo en nuestro ordenador. Ese proyecto podemos enviarlo luego a través de cualquier plataforma social o de correo electrónico, para seguirlos posteriormente en otro equipo, siempre y cuando tengamos el programa instalado.

La enorme cantidad de plugins que ofrece este programa para personalizar al máximo la experiencia que podemos tener como usuarios es sin dudas otro de sus puntos fuertes, de modo que es posible establecer ciertas funciones que no vienen originalmente en LMMS. Te recomendamos, de hecho, que te detengas para echarle un vistazo a varios de ellos que podrían serte útiles.

¿Qué tal la interfaz del programa? Cumple sin problemas. Si bien es cierto que probablemente no sea el software más bonito que hemos analizado, ni siquiera si nos limitamos únicamente a los de este segmento, tenemos que decir que resulta muy fácil usar la aplicación. En tiempos de programas muy vistosos pero difíciles de comprender en cuanto a su funcionamiento, creemos que esta plataforma tiene poco para mejorar a nivel visual.

Como único punto en contra de este programa, si es que tuviéramos que mencionar uno, sin dudas habría que detenerse en que no permite exportar los audios o pistas que generamos en formato MP3, algo que nos hubiera parecido realmente útil. No es demasiado complicado tomar las piezas musicales y convertirlas con otro programa, pero poder hacerlo desde LMMS habría sido lo ideal en cualquiera de los casos.

Tampoco queríamos dejar de mencionar que aunque este software se encuentra traducido al español, sólo lo está parcialmente, por lo que podrías encontrarte con algunas funciones u opciones que estuvieran aún escritas en inglés. De todos modos no lo consideramos un problema importante ya que la mayoría de herramientas pueden intuirse rápidamente,

De todos modos, y como cierre de este análisis, podemos decir que LMMS es probablemente un programa que recomendaríamos en su tipo. Es fácil de utilizar incluso para usuarios que nunca antes hayan probado suerte con softwares semejantes, posee una enorme cantidad de herramientas para personalizar al máximo nuestras piezas musicales, e incluso permite importar otras pistas para realizarles las modificaciones que creamos necesarias.

En nuestras experiencias y pruebas, no hemos pasado por ningún cierre forzoso ni lag, y el consumo de recursos de la aplicación está bien para el tipo de tareas que realiza, de forma que no hay motivos sustanciales para no darle una buena oportunidad si te gusta la creación musical.