XMPlay es un interesante reproductor de audio que destaca más que nada por la poca cantidad de recursos del sistema que consume, además de la enorme cantidad de formatos con la que resulta compatible, evitándonos todo tipo de inconvenientes de soporte. Incluso, aunque su diseño seguramente no sea uno de sus puntos fuertes, podemos modificar su apariencia a través de una serie de skins o pieles disponibles en su página web.

Este reproductor posee absolutamente todas las herramientas que cabría esperar de un programa de su tipo a estas alturas. Estamos hablando de que cuenta con un ecualizador de cinco bandas, además de la posibilidad de normalizar el volumen de las canciones, o bien de establecer todo tipo de efectos de reverberación. También podrás generar tus propias listas de reproducción, completar fichas con información de cada una de las canciones, etc.

¿Y qué tipo de formatos podemos reproducir gracias a XMPlay? Como decíamos casi todos los que son habituales en estos días, aunque por señalar algunos podemos hablar de WAX, ASX, M3U, PLS, UMX, MOD, MTM, S3M, XM, IT, MO3, CDA, WAV, WMA, MP1, MP2, MP3 y OGG. Pero tampoco queríamos dejar de señalar que es compatible con direcciones URL, de forma que podrás escuchar tu música preferida directamente desde la web.

Decíamos antes que XMPlay sobresale porque se trata de un reproductor de audio liviano, y vamos a ejemplificar eso con algunos números, como por ejemplo que tiene un tamaño de apenas 10 MB, por lo que puede instalarse incluso en ordenadores antiguos o en portátiles. Muchos usuarios tienen que considerar bien tanto el peso como el consumo de recursos cada vez que instalan un programa, y en ese sentido éste cumple sin problemas.

XMPlay te permitirá también establecer una serie de atajos de teclado, lo que resulta muy útil en el caso de personas que no quieren estar perdiendo tiempo para activar cada una de las funciones que podemos ejecutar en este reproductor.

Otra buena opción o función de esta aplicación que nos ha parecido interesante, tiene que ver con la posibilidad de sintonizar estaciones de radio a través de HTTP o FTP, así que si sueles utilizar otros programas semejantes. Es decir, si eres uno de esos usuarios que realmente disfrutan de escuchar sus estaciones de radio favoritas, no vas a necesitar de ningún otro software abierto.

Un detalle que tienes que tener en cuenta cuando vayas a descargar e instalar XMPlay es que el programa se descarga con todos tus contenidos en un fichero comprimido, por lo que es necesario contar con un descompresor de ZIP en tu PC. No se trata de un problema ni mucho menos, pero recuerda disponer de una aplicación de descompresión.

La ventaja de esta pequeña complicación, por llamarla de alguna forma, tiene que ver con que podemos ejecutarla de la misma manera que un programa portable, directamente llevando la aplicación en un dispositivo de almacenamiento USB. Si tienes que trabajar con varios ordenadores durante el día y no quieres estar instalando programas en todos ellos, ésta puede ser una buena opción a tener en cuenta.

La interfaz del reproductor, mientras tanto, está seguramente entre las cuestiones que menos sobresalen del programa. Esto tiene que ver sobre todo con que por momentos la aplicación queda pequeña, y además es algo antigua. De todos modos, siempre podrás modificar su apariencia mediante la utilización de todo tipo de skins o pieles que debes descargar antes desde la web oficial de los desarrolladores del software.

De hecho, verás que por momentos y al igual que otros reproductores de tiempos pasados, su diseño se divide en dos partes, algo que a algunos usuarios les gustará más y a otros menos, pero que a nosotros nos parece cómo al momento de arrastrar y soltar archivos y así generar listas de reproducción para disfrutarlas más adelante.

Bien, llega entonces el clásico resumen de lo que más y menos nos ha gustado de XMPlay, y dentro del primer apartado podemos señalar que el programa es imperceptible respecto de los recursos del sistema que consume, además de que podemos personalizar su apariencia de la forma que más nos guste, y que dispone tanto de ecualización como mezclas de audio. De hecho, en muchos sentidos se trata de un programa de reproducción de audio con más opciones de lo normal.

Sin embargo, eso no le exime de algunas cuestiones que hacen que muchos optemos por otros reproductores para nuestras canciones y audios. Probablemente lo más criticable de XMPlay sea su diseño, que no sólo es bastante obsoleto para estos tiempos, sino que además queda muy pequeño si tenemos una resolución grande en nuestro ordenador. Claro que eso puede modificarse cambiando la resolución, pero la mayoría no estamos dispuestos a ese sacrificio.

En resumen, podemos recomendarle la instalación de XMPlay a todas aquellas personas que estén buscando un reproductor musical o de audio que no ocupe demasiado espacio en sus equipos ni consuma muchos recursos del sistema, que permita reproducir la mayoría de formatos de este campo sin dar problemas, y que ofrezca mayor cantidad de opciones que la que tiene la aplicación original de Microsoft al respecto, Windows Media Player.